Islas que traen sonrisas.

“Nazco en Uterolandia, una hermosa, vasta y mágica provincia de Carmela, mi madre, mi patria.” Shangay Lily.

Con frecuencia quienes me rodean han podido escuchar de mi boca una queja sobre la televisión actual (han podido escuchar miles, esta que sigue entre ellas):la inexistencia de programas de entrevista con cierta profundidad. No me refiero a cuestionarios artificiales y pactados como los de Manel Fuentes, ni a las dos preguntas rodeadas de diez mil chorradas de Lo Más Plus, desde luego. Esta carencia de un género que me gusta mucho me ha hecho en ocasiones agarrarme con las uñas a programas que quizá no habría visto ni de coña en otras circunstancias, como el de Pedro Ruiz o el de Sánchez Dragó (sí, que pasa).

Ayer sin embargo estaba dándole salida a mi compulsiva actitud zappeadora de teleadicto (apunto de curarse por inanición y mala calidad de la droga) cuando recalé en un programa de Onda Seis, se trataba de “Shangay Lily, el universo de la diferencia”, programa que se puede ver los dominos de 21 a 22h.(ya podían los de Onda 6 cambiar al cura de Gran Hermano o a Ania por Shangay). El programa de ayer consistía en una larga y profunda entrevista con la cantautora Inma Serrano. Aunque esta música no me interesa demasiado, la verdad, me maravilló algo tan sencillo como poder asistir a una hora de entrevista sosegada e inteligente. Había visto muchas veces a Shangay en distintos espacios televisivos y me había llamado la atención, me había parecido diferente a la horda de Drag Queens zafias y sin gracia que tapizan los magazines, pero a decir verdad no conocía practicamente nada así que ayer estuve transitando por su sitio web y de veras que la visita fue muy grata. Descubrí a una Shangay Lily inteligente, política, feminista, luchadora por los derechos de los gays pero a la vez denunciando las equivocaciones de esa moda rosa tan superficial que a menudo impide una lucha política real…Me sorprendió y me gustó mucho su alegato sobre la superación de las diferencias de género y la reivindicación de la condición de “persona” de este personaje-persona que es también novelista, monologuista teatral, pionera del movimiento Drag(con contenido político y social, no al que estamos acostumbrados) y sobre todo ello una personalidad atrayente a descubrir. Es reconstituyente encontrar de vez en cuando voces que robar y es muy probable que pronto aparezca un hurto de sus palabras en Eltránsito.

Mujeres pelotaris.

Hace poco un artículo me llamó la atención sobre un aspecto de la polémica “La pelota vasca”, la marginación de la mujer en dicha cinta. Yo no me percaté de este “detalle” cuando vi la película, se ve que imbuido de la normalización del machismo aún omnipresente, y sin embargo es evidente. Como curiosidad advertir que los únicos testimonios femeninos destacados pertenecen a tres mujeres: una en calidad de madre (de preso), otra en calidad de viuda (de asesinado por ETA) y la tercera en calidad de maltratada y hasta vejada sexualmente en una comisaría. El resto de personas-personajes son en su mayoría representantes de profesiones con repercusión pública (políticos, profesores, literatos, periodistas…).Aunque el avance de la situación de la mujer ha avanzado miriadas de pasos en el último siglo estamos ante el problema de siempre, la mayor discriminación histórica, como plantea entre muchas Natalie Davis, la separación de esferas: la del ámbito privado para la mujer y la del ámbito público para el hombre.

Yo personalmente no creo (aunque está claro que se trata sólo de una convicción particular que difícilmente puedo argumentar) que existan diferencias sustanciales de actitud entre hombres y mujeres en cuanto a problemas comunes, lo que si creo es que la mujer en muchos casos tiene que actuar con una discriminación de más. Una indígena guatemalteca debe sumar a la discriminación de etnia y a la de clase la discriminación de género, que sufrirá incluso por parte de su “compañeros” de sus otras discriminaciones. Quizá esta diferencia de circunstancia vital, el tener que atender a más frentes y sobrevolar más problemas para ello si tiene puede ser en mi opinión el origen de diferentes actitudes u opiniones. De hecho en Guatemala surgió hace ya años un potente movimiento de mujeres indígenas con unas circunstancias muy particulares que tienen que ver con su tradicional discriminación y aparcamiento a la esfera privada: se sustenta en los tradicionales cauces de la comunidad de relación entre mujeres y pone especial énfasis en la transmisión de educación a los hijos en nuevos valores. Otro ejemplo claro: como las feministas de partidos de izquierda en los sesenta y setenta tuvieron que agruparse independientemente al ver como se las ninguneaba en los comités de sus propios partidos y asambleas, ellas querían afrontar la discriminación de clase y se toparon con que tenían añadido un terrible problema de género, esta circunstancio motivó el nacimiento de numerosos grupos feministas al margen de los partidos tradicionales. En definitiva en mi opinión se pueden dar diferentes características en diferentes grupos de personas en cuanto que tienen experiencias vitales diversas pero yo (repito que es más un convencimiento que otra cosa) no lo extrapolaría al hecho de ser hombres o mujeres, ya que la experiencia de un grupo de mujeres de un sitio muy concreto y en un momento determinado no será la de otro grupo con características diferentes(las mujeres universitarias iraníes, que las hay, pongamos por caso) y es tan “diferente” en cualquier caso a la experiencia de otro grupo, de hombres, mujeres o simplemente personas. Espero no haber sido ni muy embarullado ni muy determinista.

Historia de una escalera.

He estado esta tarde-noche viendo “historia de una escalera” en el María Guerrero. Me ha encantado. El reparto está muy bien, equilibrado, la puesta en escena soberbia, con cada detalle muy trabajado, y la obra…la obra es sencillamente genial. Es un texto aparentemente localista, madrileñísimo como Olga Ramos, pero totalmente universal: los hechos que se retratan podrían suceder en cualquier rellano del mundo. Uno asiste desde el patio de butacas al drama de clase sin expectativas, a las frustraciones machacadas por el tiempo y al pesimismo cíclico de nuestro destino.

Pese a semejante dramón parece que uno no tendría más remedio que salir a la calle con las comisuras de los labios flácidos y la mirada adherida al asfalto, sin embargo esta noche quiero transmitir una sensación de optimismo, de alegría por haber visto una magnífica representación, porque hace una magnífica noche ( mejor por la compañía) y porque no nos queda más remedio ante lo jodido de nuestro destino que aprender a cultivar el humor y disfrutar de las cosas sencillas. Ni la visión de la bandera de Colón me ha podido joder hoy la noche: venceremos.