Ojipláticos y cariacontecidos mientras vestimos de negro la esperanza asistimos al servilismo de los dos grandes sindicatos con el gran capital. Hoy dejamos aquí un articulo muy clarificador.
¿Es inevitable el Expediente de Regulación de Empleo en Telefónica?
Nada más lejos de la realidad
Josep Bel
La empresa, ante el fracaso de su táctica consensuada con los sindicatos CCOO y
UGT, consistente en amedrentar y engañar a los trabajadores con las
segregaciones, prueba otro sistema: la reducción de plantilla por la vía del
Expediente de Regulación de Empleo.
Porque, no lo olvidemos, la pretensión fundamental de la empresa es esa: seguir
eliminando empleo de calidad y convertirlo en basura. En la propia mesa de
negociación han tenido la desvergüenza de decir que nos tenemos que preparar a
afrontar, con menos recursos, mayor actividad.
Hay que señalar las palabras, también en la mesa de negociación, del Secretario
General Estatal de CC.OO. de Telefónica (Sr. Vesperinas): Se lamenta de que no
se hubiesen firmado las segregaciones forzosas en el 2002… para, a
continuación, señalar que se ha dado un vuelco positivo en la negociación.
¿En qué quedamos? ¿No eran buenísimas las segregaciones? ¿Ahora lo es el
despido de 15.000 trabajadores? ¿Qué criterio, qué línea sindical es esa de
decir amén a lo que la empresa va poniendo encima de la mesa? ¿No se dan cuenta
de que la empresa les ha dejado con el paso cambiado, con respecto a la
plantilla? ¿Quién dirige realmente a CC.OO. y UGT?
Somos caros, nos dicen.
Pues, bien, la masa salarial está en los niveles que tenía hace veinte años,
cuando éramos 74.000 de plantilla. En términos absolutos, porque si hacemos la
equiparación de valores, debemos estar en la mitad de hace veinte años.
El salario de un OTPI, por poner la categoría que representaba el salario
medio, se ha revalorizado estos años el IPC respectivo, más un pellizquito.
De Operadores Auxiliares, mejor no hablar, porque el grueso del trabajo lo
realiza la cadena de subcontratas de la miseria, empleando a sin papeles: Así,
si un mes no les pagan las 80.000 pesetillas, no pueden ni reclamar.
¿Somos caros, entonces, cuando costamos la mitad que hace veinte años? Hay
quien se lo cree y le da la razón a la empresa.
De todas maneras, sí que ha subido una barbaridad, hay que reconocerlo, el
salario de algunas categorías. Y estamos dispuestos a, en un ejercicio de
madurez, y por el bien de la empresa, a corregirlo. Por ejemplo: el salario de
un Presidente de Telefónica de España S.A.U. era, en tiempos de Luis Solana, de
14 millones de pesetas, anuales. Subió a 150 millones en tiempos de Cándido
Velázquez. Se disparó hasta lo incalculable en tiempos del truhán Juan
Villalonga: baste decir que entre salario, stock-options, despido y arreglillos
con las acciones, se llevó un pico de 10.000 millones de pesetas.
Pues bien, el sueldo base del actual Presidente es de dos millones… de euros.
Son los que integran estos grupos laborales y los inmediatamente inferiores (es
decir: la Dirección) los que nos dicen que costamos demasiado, y son éstos,
precisamente, los responsables del endeudamiento de Telefónica: Si sumamos la
compra de Lycos por el doble de su valor, la de Endemol, por el doble de su
valor, los 800.000 millones de la licencia de móviles en Alemania, más el
regalito de Antena 3, cuadran los 5 billones de deuda.
¡Y son estos ineptos los que nos dicen que somos caros!
Con más razón que nunca fue la huelga de 4 horas el 27 de junio.
• Ni un solo puesto de trajo perdido.
• Ni un solo derecho laboral cedido.
• Por que nuestros hijos se encuentren con un trabajo tan digno, al menos, como
el que nosotros tenemos.
• Para no echar por tierra 100 años de lucha sindical.
Esta huelga ha sido convocada en el ámbito estatal por AST-co.bas y CGT, por
los Comités de Empresa de Telefónica de Madrid y Barcelona donde se agrupa el
40% de la plantilla y por sindicatos del País Vasco y Galicia (ESK,ELA,LAB,CIG)